Desde la celebración de la Cumbre del Clima COP25, la Cabaña Real de Carreteros ha venido desarrollando una parte importante de su actividad en Madrid, que se extenderá hasta el mes de marzo.
La asociación trasladó a la capital su “Ofrenda del Pino Ibérico” como parte de la contribución que realizaban a la COP25 los pueblos selvicultores españoles agrupados en la Asociación de Ayuntamientos Forestales EsMontañas, el Colectivo de Selvicultores COSE y la Plataforma Nacional Juntos por los Bosques, entidades con las que participó en las conferencias de esta cumbre para analizar la gestión activa de los espacios forestales y su contribución a la lucha contra el cambio climático.
Se trata de una escultura sobre un pino silvestre de 350 años, muerto al secarse su fuente en los montes del Urbión, realizada por el burgalés Humberto Abad en 2006, con motivo del V Centenario del Sepelio de Felipe El Hermoso, que emula el torreón de Tordesillas donde fue confinada la reina.
La presencia del pino ibérico en Madrid, es el símbolo elegido para representar a los pueblos selvicultores españoles y una oportunidad inmejorable para poner en valor la riqueza forestal de nuestro país.
La exposición, que estuvo ubicada en el espacio Castellana Verde, gozó de un gran recibimiento entre el público madrileño. Así, el Ayuntamiento de Madrid la promocionó y autorizó su desplazamiento a la concurrida plaza Jacinto Benavente, donde se encuentra actualmente y donde permanecerá hasta el 21 de marzo, Día Internacional de los Bosques, cuando se instalará en Orea para la celebración de este evento y continuar con su labor de difusión del mensaje para la protección de nuestros bosques.